La almendra es uno de los alimentos más consumidos a nivel mundial. Se trata de un ingrediente esencial en la cultura mediterránea y actualmente está muy arraigado en la gastronomía de decenas de países.
Conocer el origen de los productos alimenticios es una característica cada vez más demandada por los consumidores. Esto es algo que tenemos muy en cuenta en Importaco, donde llevamos más de 80 años cuidando de todo el proceso para aportar la máxima calidad, desde el cultivo, hasta el producto final.
Dentro de nuestro compromiso con la sostenibilidad y alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, colaboramos con más de 300 agricultores a través del programa de buenas prácticas agrícolas para conservar la calidad de la tierra y el suelo. Además, respetamos el calendario de floración y maduración de la almendra para garantizar una adecuada cosecha, descascarado, selección y calibrado del fruto. Una vez finalizada esta fase, procesamos las almendras para clasificarlas como naturales o repeladas y seleccionamos su destino (para harinas, láminas, grano, bastones, pastas, etc.) antes de su envasado.
Contamos en Vall d’Alba, Castellón, con una planta de procesado de almendra libre de alérgenos de cacahuete (peanuts free) en la que trabaja un equipo de 85 profesionales. Allí se realizan permanentemente auditorías de seguridad alimentaria, calidad y sostenibilidad, y hemos obtenido las certificaciones IFS, BRC e ISO 14001 que acreditan el cumplimiento de los más altos estándares de trazabilidad en todas las fases del proceso.
Además, a través de nuestro Programa de Integración Agrícola, del que forman parte más de 150 agricultores, garantizamos el cumplimiento de un sistema de producción sostenible y llevamos a cabo planes para la erradicación de la almendra amarga en las 800 hectáreas de cultivo de este fruto seco.
Seguridad alimentaria y sostenibilidad en el desarrollo de la almendra
En cada una de las fases que se llevan a cabo desde el cultivo de la almendra hasta que llega al lineal de compra, realizamos controles sanitarios que abarcan la calidad nutritiva, la higiénico-sanitaria y la tecnológica.
Nuestro compromiso con la trazabilidad, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad es constante en todos los eslabones de la cadena de suministro. De hecho, contamos con un Sistema de Gestión Energética en la planta de procesado de almendra que nos permite obtener más del 50% de la energía térmica consumida en la fábrica gracias al empleo de una caldera de biomasa. Gracias a ella, evitamos anualmente la emisión de 1.222 toneladas de CO2 a la atmósfera.
La almendra es uno de los alimentos más demandados por el mercado y desde Importaco ofrecemos diversas variedades como Belona, Lauranne, Antoñeta, Penta, Soleta, Largueta y Marcona, que se adaptan a los diferentes usos que necesita la industria alimentaria.
Además, apostamos por un sistema de producción sostenible para evitar la degradación de la tierra y el suelo gracias a la supervisión del abonado, el riego, la poda, el control de plagas, enfermedades y malas hierbas. De esta manera, favorecemos la integración de la biodiversidad y el equilibrio biológico en las parcelas de cultivo, y mantenemos nuestro compromiso con la salud y el bienestar de las personas.