En Importaco llevamos a cabo un modelo de producción sostenible porque tenemos el compromiso de generar un impacto positivo en la salud del planeta y de las personas. Por eso, todas las prácticas que conforman nuestra cadena de valor giran en torno a este concepto y, de hecho, hemos establecido alianzas estratégicas que nos permiten desarrollar nuestra actividad y, de manera simultánea, favorecer el desarrollo de las áreas donde estamos ubicados.
Un buen ejemplo de estas prácticas es el proyecto de cacahuete sostenible y respetuoso con la seguridad alimentaria que desarrollamos en Argentina. En este país contamos con 680 hectáreas de cultivo propio y, además, colaboramos con otras fincas agrícolas del territorio donde, igualmente, implementamos un modelo de mejora en las prácticas agrícolas. A través de este sistema de trabajo, garantizamos la calidad y la seguridad alimentaria implementando acciones concretas como:
- Reducir al mínimo el uso de productos fitosanitarios.
- Optimizar la salud del suelo mediante una gestión activa de los residuos.
- Hacer un uso eficiente de la energía.
- Monitorizar el riesgo de contaminación en los cultivos para eliminarlo.
En este sentido, empleamos un programa para evitar riesgos emergentes del cacahuete como virus, bacterias y toxinas en las fases del cultivo y la cosecha, una acción que nos permite garantizar la máxima trazabilidad del producto a lo largo de la cadena de suministro. Esto, a su vez, nos permite maximizar la integración vertical y desarrollar estrategias de producción, propia o integrada, con visión a largo plazo.
Tecnología y precisión para obtener los mejores cacahuetes del mercado
El empleo de los medios técnicos más novedosos nos ayuda a desarrollar una óptima gestión del cultivo. Contamos con maquinaria de última generación que aumenta la eficiencia y la precisión en todas las actividades agrícolas reduciendo al mínimo su impacto medioambiental.
Formamos parte del Argentina Peanut Sustainability Project junto con otros miembros de la SAI Platform. El objetivo de este proyecto es alinear las expectativas y requerimientos de los compradores europeos con el desempeño de los proveedores sudamericanos y, en base a eso, seguir explorando prácticas de sostenibilidad y nuevas oportunidades dentro del sector del cacahuete argentino. Además, somos parte de la Iniciativa de Agricultura Sostenible, que nos permite mejorar las prácticas de nuestros agricultores y reducir el impacto ambiental de nuestros cultivos.
A través de la Evaluación de Sostenibilidad Agrícola (FSA) evaluamos, mejoramos y validamos la sostenibilidad de las fincas de nuestra cadena de suministro de cacahuete en Argentina, lo que nos permite llevar a cabo una producción responsable, consistente y respetuosa con el medioambiente.
Otro de nuestros pilares como empresa es el respeto de los derechos humanos y los estándares internacionales establecidos por la Organización Internacional del Trabajo y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. Por eso, colaboramos con proveedores sujetos al Código de Conducta que salvaguarda los derechos de los trabajadores y empleamos la Plataforma SEDEX y auditorías SMETA 4P para controlar y monitorear las condiciones laborales de todas las personas que integran nuestra cadena de suministro.